Tuve sexo con Mbak Kayes, una madre de pensión con el encanto de un cuerpo regordete.
Francamente, todo sucedió por accidente. En ese momento compré un libro sobre el sexto sentido o "subconsciente", sólo por diversión mientras estaba en una librería. La esencia del libro enseña esto. Si queremos algo entonces tenemos que intentar visualizarlo.
Un día lo que visualizamos sucederá, se hará realidad. ¿Sueño? No. Porque para alcanzar el sexto sentido una persona no debe quedarse dormida, sino que necesita reducir las ondas eléctricas en su cerebro de ondas beta a ondas alfa. ¿El método? Es muy fácil... Sólo cerramos los ojos, imaginamos bajar una escalera de caracol con al menos 10 marchas.
¿Cuál es mi deseo? Esto es de mala educación. Quiero tener sexo con Mbak Kayes (cuando era más joven se llamaba Neng Kayes). La Sra. Kayes es mi madre de pensión.
Aunque tiene cuat...